La educación financiera ya sabemos no la tenemos en nuestros planes de estudios obligatorios ni siquiera en los profesionales, y esto está claro que debería de cambiar, pero… ¿Cual es la edad ideal para que los niños empiecen a adquirir conocimientos financieros?
Uno de cada 6 jóvenes españoles no sabe para que sirve una factura o como se utiliza una tarjeta de crédito. Y esto no hace más que reflejar la poca cultura financiera que tienen los padres y la nula educación financiera que se imparte en los centros de estudio.
Para que los jóvenes de 15 años tengan conocimientos básicos de economía y ahorro hay que empezar a ofreciéndoselos desde que son pequeños, de hecho, a partir de los 4 años sería una buena edad. A esa edad en la que el niño ya empieza a pronunciar palabras como “Papa, me compras?”. A esa edad ya empiezan a tomar conciencia de que el dinero se puede cambiar por cosas.
Evidentemente no vamos a enseñarles que es la prima de riesgo, como adquirir una hipoteca en las mejores condiciones o como invertir, pero si que se puede empezar a acercarles determinados términos para que empiecen a familiarizarse, así como pequeñas historias o fábulas que les enseñen que hay que ahorrar, no malgastar, etc. Sobre todo en cuanto a la mentalidad se refiere, ya que los conocimientos se pueden adquirir tarde o temprano si se quiere pero si no tienen una buena base, les costará incluso darse cuenta en un futuro de lo que están haciendo mal.
Os pondré un ejemplo, imaginaros que en una familia los padres no paran de decir que el dinero es malo, que solo trae problemas, que el dinero no da la felicidad, que los ricos son malas personas, y así dia tras dia. El niño crecerá con la mentalidad de que el dinero es malo, y que solo trae problemas. ¿Como un joven que piensa eso puede tener el más mínimo interés en educarse financieramente, avanzar económicamente o pensar en riqueza?
En el campo del ahorro se les puede enseñar a no malgastar electricidad, agua, etc. Se les puede premiar cuando hagan cosas bien con un pequeño incentivo económico que tendrán que ahorrar y posteriormente poder gastar en alguna meta que hayan fijado a corto plazo, como algún juguete.
Cuando adquieran el hábito de ahorrar, les acompañará toda la vida y lo harán con total naturalidad.
Además, tienes que tener muy en cuenta que en la sociedad actual, los niños y jóvenes se ven constantemente bombardeados por mensajes publicitarios que los inducen al consumo. Esto les convierte en potenciales víctimas del consumismo y de desarrollar conductas negativas para el futuro como la compra impulsiva. No nos olvidemos que los niños a temprana edad ya están utilizando dispositivos móviles, por lo tanto están expuestos.
Por esto es muy importante que los eduquemos financieramente para que desde bien pequeños obtengan los valores, hábitos y recursos para poder hacer un uso adecuado y ético del dinero y así convertirse el día de mañana en adultos económicamente responsables e independientes.
No podemos cambiar el pasado, pero sí podemos contribuir en un futuro mejor.