Algo que me habéis preguntado muchos… es, que son los contratos de futuros, y cómo funcionan. Esto es algo difícil de explicar con palabras, pero, con este programa de animación es más fácil, y ya que le estoy cogiendo el truquillo, voy a intentar simplificarlo al máximo para que sea muy fácil e interesante… vamos al lío!
Los orígenes de los futuros financieros
Vamos a empezar rápidamente por sus orígenes, los contratos de futuro nacen en Japón alrededor del año 1600, el objetivo de estos contratos era asegurarse el precio de una cosecha en caso que viniera una adversidad climatológica.
Es decir, que se fija un precio a pagar hoy por una cosecha, que aún no ha sido recolectada. De esta forma el agricultor se asegura que venderá su cosecha pase lo que pase, y el comprador que recibirá lo que compra a un precio ya pactado.
Los primeros productos que se negociaron a futuro fueron materias primas, concretamente el arroz.
A día de hoy, los más utilizados son el petróleo, el café, las divisas, el gas natural, el oro, la plata, el azúcar, el maíz… y recientemente el agua, pero no el agua en sí, si no los derechos de su uso. Es algo muy distinto y que mucha gente desconoce. Pero bueno, no voy a desviarme, seguimos con los futuros.
¿Cómo funcionan los futuros financieros?
Bien, un contrato de futuro es una operación de compra-venta que consiste en establecer las condiciones hoy, pero dejando la ejecución para otro momento ya establecido. Esto quiere decir, que el comprador, hoy acepta el precio que va a pagar y contrae la obligación de comprar ese futuro (que puede ser acciones , de materias primas, etc) en la fecha de vencimiento establecida. Por otro lado, el vendedor tiene la obligación de entregar el activo al comprador en la fecha del vencimiento establecida. Básicamente, la función principal de un futuro es aplazar el pago.
Aparte del comprador y el vendedor, hay un tercer actor en esta operación. La Cámara de compensación o contrapartida, es decir se trata de una sociedad que garantiza que todo salga correctamente.
Ejemplo de futuros financieros
Imaginaros que… Pepe tiene un negocio de venta de frutas y necesita 1.000 Kg de naranjas para distribuir entre sus clientes. Quiere comprar 1000 kg de naranjas, mediante un contrato de futuro, y el precio en ese momento es de 500€. Accede al contrato el día 1-10-2020 y el contrato finaliza el 21-12-2020. Al hacer esto, Pepe se está asegurando el precio de hoy en el futuro, por lo que lo que estará haciendo es “Aplazar el pago” hasta el vencimiento. Las garantías de pago deben estar depositadas en esa cámara de compensación de la que he hablado, pero la compra no se habrá realizado. Se realizará en el vencimiento.
Por lo tanto, Pepe, tanto si el precio de las naranjas sube como si baja, pagará lo acordado en la fecha en la que finalice el contrato.
Juan es la otra parte, es agricultor, y le gustaría tener su próxima cosecha vendida lo antes posible, por lo que, vende sus 1.000kg de naranjas al precio acordado por pepe.
Si llegado el momento, el precio de la naranja ha subido a 600€ los 1.000kg, Pepe se habrá ahorrado 100€ de si hubiera comprado en este preciso momento, en cambio, si el precio de la naranja al vencimiento es de 400€, Juan estará de enhorabuena, ya que el va a recibir los 500€ en vez de los 400€ que le pagarían en este preciso momento.
Si se diera el caso de que hubiera inundaciones y por ende muchas cosechas se perdieran, el precio de las naranjas subiría, por lo tanto a Pepe le saldría muy bien la jugada.
¿Y si alguien se echa para atrás?
Voy a poner otro ejemplo para que veáis esto. Recordáis a principio de todo el tema del bicho como Los futuros de petróleo llegaron a estar en negativo, algo que no se había visto nunca y que de hecho hice un video al respecto.
▷ CAÍDA HISTÓRICA DEL PETRÓLEO BAJANDO UN 300% Y COTIZANDO EN NEGATIVO
Bien, los compradores de los futuros de petróleo, con la baja demanda que había, decidieron cerrar sus contratos y no comprar dicho petróleo. Cancelaron los contratos aun asumiendo pérdidas, ya que si los que compran el petróleo que eran los que lo iban a comercializar, no iban a tener demanda, tampoco tenía sentido comprarlo ya que entre otras cosas no tenían ni lugares para almacenarlo. En otras circunstancias, los barriles que entran, por los que salen. Pero si no salen… llega un momento en el que no puedes meter más y…recordad que la paralización del transporte fue en seco e indeterminada. Por lo que eso hizo que los contratos adquiridos se fueran cerrando.
Esto es malo también para el vendedor, ya que deja de vender un producto que ya tenía “apalabrado”, pero, en este ejemplo concreto, si el comprador compró a 40$ y decidió cerrar la operación cuando estaba en 30$, el vendedor se llevaría 10$ y mantendrá aún su producto que podrá vender a otra persona.
La otra cara de los futuros financieros, la especulación
Un porcentaje altísimo de los contratos de futuros nunca llegan a materializarse. Esto quiere decir, que simplemente son usados con fines especulativos.
Es decir, yo compro un contrato de futuros de 1.000 naranjas a 500€, y cuando sube a 550€, lo vendo, y me llevo esos 50€. No quiero las naranjas, quiero la variación del precio.
Esto es lo más habitual en cuanto a operación de futuros se refiere. Tu desde casa puedes invertir en futuros de petróleo y no por ello querer recibir en casa 1.000 barriles.
En ese caso te preguntarás… ¿Qué sentido, o mejor mejor dicho, utilidad, tienen los futuros si no es la de adquirir el activo subyacente? Pues una importantísima. Fijar el precio de los activos subyacentes. Los activos subyacentes son los activos sobre los que se hacen los contratos. El petróleo, el café, el zumo de naranja… etc.
Es decir, que con dicha especulación se va fijando el precio de dichos activos subyacentes y por lo tanto se fija el precio del mercado en ese bien.
¿Cómo operar con futuros?
Si estás viendo este video, muy seguramente sea por que no entiendes como funcionan. Esta explicación está hecha para que lo entiendas por encima, pero hay mucho que aprender de ellos, y sobre todo de sus riesgos de cara a operar debido al apalancamiento financiero necesario para optar a ellos.
Por eso, no te recomiendo que inviertas en futuros si eres principiante. Son productos financieros para profesionales que requieren de muchos conocimientos no solo del funcionamiento de los futuros si no de los activos subyacentes, y sobre todo, estamos hablando de activos financieros de mucho riesgo.